Aunque no sepa quererte de la forma que a ti te gustaría, siempre te querre con todo mi corazon de la mejor forma que sepa.

30 septiembre 2010

Volver a sentir que eramos aquella niña que corria por cumplir un sueño que mas tarde, recordaria con alegría

Echemos una vez mas la mirada atrás, permitámonos de nuevo el lujo de rebuscar los recuerdos en nuestra memoria y observarlos, pasarlos como si se tratara de una exposición de fotografías, fotografías vivas.
Recordemos hoy, todas juntas aquel hermoso día, ¿os acordáis de lo que hacíais en estos instantes? Yo si, perfectamente. Ahora, justo en este momento mis oídos se deleitaban con la dulce melodía que desprendían cuatro chicos con su música, es mas justo hace diez minutos miraba la hora que era, y me sorprendía al ver lo rápido que había pasado la primera hora del concierto.
Recordemos lo que sentimos, he intentemos describirlo, aunque creo que todas sabemos que eso es totalmente imposible. Creo que jamás explicaré utilizando las palabras lo que sentí en el momento en el que aquel PUM PUM seguido de HUMANOID avisaba de que ya estaba comenzando la hora y media mas frenética y hermosa de mi vida.
Recordemos esas sensaciones. Son sensaciones increíbles, mágicas... únicas. Sensaciones que se que nadie que no sienta lo mismo que yo siento hacía ellos podrá sentir.
Es especial recordar lo feliz que fuiste en esos instantes y lo feliz que serás la próxima vez que los veas.
Recordemos a la gente que conocimos, a las personas a las que simplemente les dirijíste una sonrisa o con las que hablaste cuatro palabras solo por estar allí, en el mismo lugar que tu y por al misma razón. Es especial que gente de tantas edades diferentes lleguen a sentirse tan cómodas las unas con las otras. Es especial leer que alguien esta muy feliz de conocerte, que aunque hayas hablado cuatro minutos con ella da lo mismo, le caíste bien y quiere volver a verte... eso si que es especial.
Recordemos los días y horas de espera, todos los momentos en los que solo deseábamos que esa fecha llegara de una vez.
Recordemos el momento de su partida, el momento de su llegada y el momento de su presentación.
Recordemos sus pequeños bailes y sus muchas gracias.
Recordemos lo felices que fuimos.
Recordemos a esa niña con nuestro mismo aspecto corriendo por cumplir un sueño que meses después recordaría con gran alegría.

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sonrisas que se expresan