Antes de ayer te odiaba mas que a los helados de limón, ayer te ame como nunca antes, hoy el olvido me parece un suicidio y el recuerdo un masoquismo diario. Te necesite como nunca antes crei hacerlo, deje que mi mano paseara por cada uno de tus lunares, deje que me llevaras por las calles de tu cuerpo, en concreto por la avenida placer. Deje que el veneno de tus labios me infectara hasta el extasis y que el cielo se quedara lejos de mis pies. Consenti todo, me deje hacer, que si el pecado eran tus labios yo ya tenia un sitio asegurado en el infierno, pero nada conseguiria apartarme de ellos. Perdi la cordura entre tus sabanas, mi sonrisa quedo atrapada en tu mirada. Besos con sabor a tabaco me trajeron recuerdos muy lejanos que me hicieron volar, sentirme feliz, viva, inmensa.
Que me encantaba tirarme en tu cama y abrazarme a ti, sin decir nada, durante un par de horas por muy ñoño que sea. Dormir abrazada a ti, enredando mis piernas en las tuyas y rodeada de tu aroma, lo adoraba, te lo juro. Que pequé de enamorada, de soñadora, de vivir a un millón de kilometros de la tierra cuando me agarrabas la mano. Pequé de no saber decirte que no(a día de hoy aun no se decirtelo), de besar tus labios hasta dejarlos doloridos, de ninfómana.
En aquellas época pequé en tantas cosas que no dan las palabras para relatarlas, pero al menos si tengo las suficientes para decir que no me arrepiento de nada, que lo repito una vez mas, si estar contigo es condenarme a ir al infierno mi billete ya esta asegurado, porque viviria cada uno de los dias de esta puñetera vida a tu lado, sin arrepentirme de ninguno de ellos.
Dios, que bonito!
ResponderEliminarEn serio, es precioso!